miércoles, 29 de septiembre de 2010

Espiral de humo negro

Entramos en un espiral oscuro. Ambos sabemos que no hay retorno, que es mejor vivir el hoy antes que repetir una historia que pudo haber terminado peor. O que podría haber seguido hasta descostillarnos de amor. Pero el espiral que nos envuelve cada vez es más tenso, cada día que pasa lo único que podemos ver se viste color negro. Insanos nos consumimos, crees y creemos que estamos felices, hasta te arriesgas a decir que no confiarías en alguien que no toma. Absurdo, egoísta y egocéntrico mostras tu contratapa, sin embargo sé que en tu paginas interiores lo único que hay escrito es "no veo la hora de volverte a ver, pero no me importa porque mi ego me ata" (ilusiones de mi mente escritora e inspirado en lithium)
¿Quién es más fuerte? ¿Quién es superior? ¿Quién es Dios? Nadie, porque tal como sucede entre vos y yo el azar o el destino conduce nuestra vida y siempre aunque yo lo desee te voy a encontrar. Hace más de seis años que sucede exactamente lo mismo: cuando vos queres yo no quiero, cuando yo quiero vos no queres. Idiotas, parecemos personajes de una película que ni siquiera sabría como llamar porque no tenemos nombre, no tenemos rostro, no tenemos reparo en el mal que nos hacemos. O quizás no, porque otra vez volves, regresas a mi vida y entiendo todo (sos mi rasante oscuridad)
Somos una secuencia irrepetible para los demás pero a la vez una secuencia que se repite una y otra vez. Giramos sobre el mismo eje, somos un espiral.

jueves, 23 de septiembre de 2010

ME HACE MIERDA BORRARTE

miércoles, 15 de septiembre de 2010

I sleep alone.

Una vez conocí un hombre que cantaba canciones de rock. Su andar era bastante particular, su rostro era original, su ropa reflejaba personalidad y su voz algo desprolija, cada vez que cantaba cambiaba y era totalmente diferente a lo normal. Te invitaba a escucharlo, calmada pronunciaba cada verso con miedo y aun así era encantador presenciar su acto. Hechizada me acerqué a hablarle. Cuando giró y mis ojos hicieron contacto con él sentí que al mirarme su ser penetraba mi mente. Su mirada envolvía la situación, cada minuto que pasaba parecían crear distintas historias sin tener que pronunciar ni un solo vocablo.
Nunca supe cuanto tiempo paso hasta que empezó a hablar. Al principio balbuceaba, pero cuando entro en confianza respondió a cada pregunta como si fuera un filosófo graduado en Grecia. Este hombre infundía respeto. Sin embargo al hablarle de amor todas las respuestas no parecían tener ningún contenido sentimental, en cambio su rostro emanaba extrema emotividad. De hecho lo único que recuerdo de aquella conversión fue el comentario menos cargado de intelecto. Me dijo que recorría los telos de capital en busca de cariño, que jamás utilizaba su cama para aquellos impulsos sexuales, porque guardaba el olor de la mujer que había dejado escapar.
Anonadada lo deje hablando solo. Caminé hasta la estación de tren, me senté del lado de la ventana en el único vagón que estaba completamente vacío y me puse a llorar.

domingo, 12 de septiembre de 2010

Please, please.

Quiero morirme. No lo aguanto más, ni siquiera te dije adiós y ya estoy llorando desconsolada. Igual es inútil de mi parte decir que quiero morir porque ya me mataste. No puedo seguir, no puedo dormir, no puedo viajar en tren, no puedo ir al shopping, no puedo ir a la plaza, no puedo entrar en mi habitación, no puedo escuchar las canciones que tanto adoro, no puedo mirar películas, no puedo sonreír, no puedo leer un libro, no puedo dejar de llorar, no puedo navegar por Internet, no puedo amar, no puedo ser feliz porque ya no estas. Ya no estas, ya no estas, ya no estas. Y yo quiero que estés, yo quiero que te quedes, yo quiero seguir, yo quiero morir a tu lado no sin vos, yo quiero tu ser, yo quiero quererte para siempre, yo quiero tu luz iluminando mi rostro, yo quiero tu tacto, yo quiero todo de vos, yo quiero, yo quiero, yo quiero, yo quiero, yo te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo con locura, quedate. Quedate, quedate, quedate. Porque siento temor, siento temor, temor, temor, miedo, tristeza, ganas de morirme, me quiero morir.

sábado, 11 de septiembre de 2010

3

¿Existe la numerología? Algunos dicen que si, otros lo creen en verdad y hay gente como yo que duda de que sea cierto. Sin embargo, creo que un número me persigue. Un número mágico denominado 3 rige mi vida, aunque supuestamente según la numerología el que envuelve mi vida es el 6. Si nos ponemos a analizar de manera simple -esto no requiere mucha sofisticación- tres más tres son seis y ahí si coincide con "mi destino". Pero como todo lo que me fue asignado a mi vida, me reuso a acatar ese designio, soy una rebelde, mi vida es como es pero con cada paso que doy me rebelo contra ella. No la quiero. Quiero otra vida, otro número.
Entonces elegí el 3. Y vos también. Es por ese motivo que todo esta a punto de derrumbarse sobre nuestras cabezas, se esta por cerrar el circulo que creíamos (ingenuamente) que jamas se cerraría. Vos me dijiste que no lo pensara así, pero ¿cómo hacerlo si todo parece coincidir? No puedo ir en contra de ello, aunque lo quiera.
3 fueron los mejores besos que recibí en mi vida, 3 fueron los hombres que marcaron mi vida, 3 fueron los años que pase junto a ella, 3 son los años que la extrañe con dolor, 3 son los artista que revolucionan mi mente, 3 son los años que paso a tu lado. 3 ES TU NUMERO FAVORITO.
Esa es mi maldición todo se acaba a los 3 años de que empiezo una relación sea una amistad, un noviazgo, un amor musical, un amor literario, o simplemente la manera en me conduzco en la vida. Soy tan pueril, que ni siquiera puedo mantener las cosas o las personas que quiero. Quizás dentro de 3 años ni siquiera existas, ni siquiera me acuerda de cosas que hoy recuerdo con tanta nitidez. Pero eso no lo sé, porque cada vez que pasa la cantidad denominda para mi vida, algo o alguien me golpea la cara y me tira contra la pared, dejandome más marcada de lo que ya estaba.

viernes, 10 de septiembre de 2010

Killing lies

Que tonta que soy, ¿cómo no me di cuenta antes?! Como futura comunicológa que seré debí analizar tu discurso con anterioridad, en vez de tomar una decisión estúpida y lastimera. Ahora, en el minuto en que escuché la voz del flaco diciendo "...que bien te ves cuando en tus ojos no importa si las horas bajan, y el día se sienta a morir", entendí (por fin) lo que querías. Y, nuevamente me duele todo. Retumban adentro mio todas las palabras que algún día dijiste y, en especial, las que pronunciaste algunas horas atrás.
Entonces, puedo decir francamente que te mentí. Que realmente no quiero lo mismo que vos. Que vos y yo no existe porque somos distintos. En su totalidad. Quizás me apresuro al escribir esta nota, pero estoy triste y la única manera de dormir en paz es escupiendo todo lo que se halla en mí interior. Traté de hablar con vos, llame a tu casa, pero dormías. Vos si descansas tranquilo. Vos si soñas con calma porque sabes lo que queres. De hecho, me cuestiono si realmente me amas.
Las horas pasan, los días también. Sin embargo, no puedo evitar ponerme nostálgica y pensar ¿cuál fue mi error? ¿En que momento no te ame como debía? Es lo único que puedo darte de mí. Te invite a ser parte de mi mundo de fantasías, sin embargo abriste los ojos y ahora elegís la realidad. Vos queres algo que yo no te puedo dar. Te amo de verdad, no te das idea de cuanto porque si lo hicieras todo volvería a ser como antes. Simplemente que vos no queres. No me queres como antes, si alguna resaca de mi amor queda en vos es solamente en los recuerdos de lo que alguna vez fue algo agradable e innovador.
Ahora tu ser es deslumbrado por algo o algunas personas que no son como yo. No son yo. No te regalan cuadros surrealistas, sino parques de verdad. Lo siento mucho, pensé que estaba feliz con la decisión que tomamos. Pero no me había dado cuenta, quizás ni siquiera vos lo sabes, aunque sos bastante claro. Soy yo como siempre la que se engaña.
Lo único que quiero ahora es poder hablar con vos, y decirte lo que finalmente creo que debemos hacer. Estoy muy seguro que vos vas a estar feliz. Porque ya lo estas. En cambio yo no, por no poder darte algo más de mi, de mi vida. Lo peor es que te lo advertí desde el comienzo y vos dijiste que siempre estarías. Pero no estas como yo quiero.
Ya no quiero esperar. Quiero acabar con todo, para dejar de sufrir aunque se que voy a ser más infeliz que nunca. No te voy a molestar más, porque prometo olvidarme de vos. Pero eso también es una mentira.

miércoles, 8 de septiembre de 2010

No doy más


Si no me llamas hoy prometo olvidarme de vos para siempre.

martes, 7 de septiembre de 2010

Necesito decirte adios.

Finalmente te convertiste en uno más del montón. En aquello que nunca quise que fueras:
Una hoja en blanco.
Un contacto más.
Un recuerdo.
Una tormenta.
Una enfermedad.
Una imagen difusa.
Una foto vieja.
Un amor perdido.
Un canción interminable.
Un llamado inesperado.
Un beso olvidado.
Un retaso de tela.
Un número de teléfono.
Una casa vecina.
Un asiento vacio.
Un cuento.
Una película.
Un sueño.
Un cuerpo sin vida.
Un ser sin rostro, sin identificación, sin historia.
Un sin fin de laberintos en mi mente, que no me dejan ser lo que siempre fui.
Pero se que estás (en algún lugar).

lunes, 6 de septiembre de 2010

You're searching for something I know

Te busco tontamente. Salgo desesperada a la calle y entre la gente siento tu presencia. No sos vos, es alguien más. Sin perder las esperanzas levanto la vista nuevamente y sigo caminando. Mis pies arden de dolor, pero yo continuo porque sé que en algun momento, en el lugar menos indicado te voy a encontrar.
Necesito buscarte. Mi corazón herido quiere consuelo, por eso en el tren me siento en los lugares para dos pasajeros. Ilusionada, miro por la ventana para ver si te diviso entre tanta gente. Sin embargo, a medida que el tren se llena mi alma recobra su pesar, en tu lugar hay un gordo, un rollinga, una señora, un niño, un jovén. Ya no estás a mi lado.
Quiero encontrarte. Voy a la plaza, espero en los bancos con un cigarrillo en la mano. No hay rastros de vos. Es como si no existieras, como si el mundo te hubiera tragado y llevado a los confines de la tierra. Y no lo soporto tu ausencia.
Me es necesario saber de vos. Cada vez que alguien llama por teléfono mi corazón palpita fuertemente. Atiendo y del otro lado es la voz de alguien que desconozco. Me converti en una piedra de marfil, nadie llama por mi. Pero aún conservo la idea de que vas a llamar porque no me comprendo viviendo sin vos.
Tengo que verte. Como aquellá vieja canción de Carol King, espero que llames a mi puerta. El timbre suena y pienso que sos vos. Me equivoqué, es un vecino o una vecina que quiere hablar con todos menos conmigo. No tengo a nadie con quien hablar. Nadie me busca. Nadie me necesita. Nadie quiere saber de mi. Nadie me dice como estas.
Estoy sola.

viernes, 3 de septiembre de 2010

¿En qué momento se derrumbo todo?

Ultimamente mi cabeza parece tratar de recordar todo. Sin impedirlo me dirijo a cada recuerdo como aquella guerrera que no le teme a nada: me armo de valor, corro el flequillo que tapa mi mirada de coraje, me aproximo lentamente hacia el lugar, sudo y las gotas de sudor pretenden ser lágrimas. Pero, a medida que avanzo me doy cuenta que en verdad estoy llorando y esa pose de guerrera se transforma en la de una indefensa niña que no sabe hacia donde huir. Tiemblo, mi vista se nubla, quiero correr pero mis piernas están atadas, lloro y mi boca emana un estruendo que paraliza completamente mi llanto. Ya estoy inmersa en el caos.
Desgarrada, parezco esa secuestrada que pide clemencia. Por favor- grito una y otra vez- dejenme en paz. No sé que hacer, no sé en que momento se derrumbo todo, no sé si quiero morir de está manera, con los ojos vendados y las manos atadas. Sin embargo, mi cuerpo a medida que pasan los días parece estar más deteriorado: no estoy comiendo bien, mis labios están hinchados y duros, siento más que antes los golpes que me dio la vida y creo (si lo creo) me estoy volviendo más loca y enfermando rápidamente. Me encontraron desprevenida y mis defensas están bajas. Todo en mi es malestar.
Necesito a alguien para hablar, a cada minuto que pasa me siento cada vez más sola. No hay nadie, estoy sola en este combate con mi memoria. Entonces, con mis últimas bocanadas de aire digo ¡me rindo! Y todo se presenta ante mí como una película muda, en la que no hay diálogos, en la que solo la imagen vale más que mil palabras. Calmada, dejandome llevar por cada toma, cada escena siento mi corazón más ligero como una pluma meciendose en plena brisa. Todo me parece tan familiar, tan antiguo, tan cercano, tan agridulce, tan emocionalmente difícil. No soy tan fuerte como para rendirme sin salir lastimada. Me siento tan mal, pero el show debe continuar.
Shokeada observo el film, los recuerdos cada vez son más nítidos y puedo describirlos con claridad incluyendo los diálogos que le faltan. En todas aparezco yo, en todas apareces vos. Y es en ese instante que me doy cuenta que vos sos quien me rapto, quien me quito la vida. Mi verdugo: vos, tus palabras, tus regalos, tus fotos, tus canciones, tus recuerdos, tu aroma, tu ser. Sin alma me quede, por estar enredada en vos. Enferma, es mi condición actual. Diagnóstico: obsesiva de los recuerdos.

jueves, 2 de septiembre de 2010


I'm in love with nobody