Recordé sus gustos, las canciones que oíamos,
su cuerpo lunar refugio celestial
Crema de estrellas (Soda Stereo)
su cuerpo lunar refugio celestial
Crema de estrellas (Soda Stereo)
Hoy me acorde de vos y sentí que nunca más hiria a encontrar el amor en el tren. Solo pasa una vez. A medida que avanza mi vida sobre rieles algo de mí sabe que cada vez se aleja más de vos. Un día un poquito más, otro día otro tanto. Entonces una lágrima se escabulle entre mis lentes, el sol la ilumina y el surco que forma en mi cara me hace desear que el día esté nublado. No quiero ver aparecer el amanecer radiante que alguna vez nos cobijó.
Inmediatamente agacho mi cabeza, es como si tratara de esconder mi tristeza o quizás sea la vergüenza de estar llorando a las 8 de la mañana en la estación de Lomas. Pero no puedo evitar recordar todo lo que vivimos dentro de aquellos vagones, nadie me enseño a no amar por la eternidad. Terrible pecado he de cometer como mortal. Aunque no soy yo la culpable, vos eras quien debía colocar sobre mis ojos la venda que me ayudara a aprender a no verte en la oscuridad. Ahora como una niña asustada sé que cuando cierre los ojos vos vas a ser la primera imagen en mi mente, vos sos el protagonista de mis sueños, de mis fantasías diurnas, de mis deseos.
Aun así sigo tan triste, sigo sin vos. ¿De qué sirven los recuerdos si al final lo único para lo que sirven es para sufrir o poner la cara de nostalgia de que todo alguna vez fue mejor? Sin saber la respuesta, la verdad es que quiero morir para vos, quiero ser solo un recuerdo más, alguien a quien alguna vez diste todo tu amor, alguien a quien invitaste a ser parte de tu vida, alguien a quien dejaste ir, una sombra multicolor que resguardo tu figura para que solo seas feliz. Prefiero terminar así antes que morir siendo la piedra de tu zapato. Tu error más placentero, tal vez.
Por eso para vos yo voy a dejar de figurar en tu mapa, en tu camino a casa, prefiero ser el único número de celular que te aprendiste de memoria, la canción que no queres volver a tocar, el dibujo que no terminaste, la foto mal revelada. Sin embargo no prometo lo mismo, yo si voy a intentar olvidarte para siempre, porque recordarte solo me hace querer volver o cerrar los ojos para nuevamente ver aquella primera expresión que me enamoro. Porque estoy maldita, alguien susurro a mi oído y quede eternamente hechizada y no puedo parar de recordar cada detalle de vos, cada gesto o palabra.
Inmediatamente agacho mi cabeza, es como si tratara de esconder mi tristeza o quizás sea la vergüenza de estar llorando a las 8 de la mañana en la estación de Lomas. Pero no puedo evitar recordar todo lo que vivimos dentro de aquellos vagones, nadie me enseño a no amar por la eternidad. Terrible pecado he de cometer como mortal. Aunque no soy yo la culpable, vos eras quien debía colocar sobre mis ojos la venda que me ayudara a aprender a no verte en la oscuridad. Ahora como una niña asustada sé que cuando cierre los ojos vos vas a ser la primera imagen en mi mente, vos sos el protagonista de mis sueños, de mis fantasías diurnas, de mis deseos.
Aun así sigo tan triste, sigo sin vos. ¿De qué sirven los recuerdos si al final lo único para lo que sirven es para sufrir o poner la cara de nostalgia de que todo alguna vez fue mejor? Sin saber la respuesta, la verdad es que quiero morir para vos, quiero ser solo un recuerdo más, alguien a quien alguna vez diste todo tu amor, alguien a quien invitaste a ser parte de tu vida, alguien a quien dejaste ir, una sombra multicolor que resguardo tu figura para que solo seas feliz. Prefiero terminar así antes que morir siendo la piedra de tu zapato. Tu error más placentero, tal vez.
Por eso para vos yo voy a dejar de figurar en tu mapa, en tu camino a casa, prefiero ser el único número de celular que te aprendiste de memoria, la canción que no queres volver a tocar, el dibujo que no terminaste, la foto mal revelada. Sin embargo no prometo lo mismo, yo si voy a intentar olvidarte para siempre, porque recordarte solo me hace querer volver o cerrar los ojos para nuevamente ver aquella primera expresión que me enamoro. Porque estoy maldita, alguien susurro a mi oído y quede eternamente hechizada y no puedo parar de recordar cada detalle de vos, cada gesto o palabra.
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