miércoles, 11 de noviembre de 2009

Los cuerpos perfumados

Did I disappoint you?
I lie to you, yes you did.


Jazmín, se dio cuenta que la persona que amaba era, nada menos, que el dios Zeus. El dios maligno y enamoradizo como siempre, seducio a Jazmín para que le entregara todo su ser. Destrozada, la tímida muchacha le expreso a Zeus, maldiciendolo, todo lo que pensaba acerca de esa actitud tan vacía de tomar el alma de una persona sin sentir verdadero amor por ella.

Jazmín: Errante fui al creer en vos pero de todo esto saco una conclusión, la único bueno que aprendí es que lo que te enamora de una persona es una especie de olor que te llama hacia esa otra persona. Es inevitable probar. Deseas que ese olor se impregne en vos, como si te dieras un baño de pétalos de rosas.
Quizás esa sea la clave para uno de los rituales más añejos que mantiene nuestra sociedad y que nos permiten formar nuestra especie. Quizás no lo vistes así, el impulso te ciega los ojos. Pero momentos, como hoy, pienso que podría haber sido diferente. Veo la diferencia que radica en vos y que me hace pensar que soy diferente a vos en muchos aspectos que no veía, ademas de ser una simple mortal. Diste todo pero todo lo que das regresa. Lamentablemente no hay ninguna píldora que te ayude a borrar lo feo (Coiffeur, "Buenos recuerdos"). En eso radica, a veces, las ganas de experimentar.
Cediste tu alma, nunca voy a poder robar nada de vos excepto momentos que son difíciles de recordar. La memoria a medida que pasa el tiempo se borra por si sola. Lo peor de todo es que yo cedí mi alma a vos pudiendo haber encontrado a alguien en iguales condiciones. Aun hay seres en estado puro, simplemente que yo no encuentro a quienes son así, mejor dicho, siempre probé lo que estaba prohibido, lo opuesto a lo que me enseñaron a creer.
No me lamento, simplemente pienso que podría haberme enamorado de alguien igual a mi. Narcisista, no. Pero tu perfume es diferente al de los demás, al igual que el mio, esta usado. Jamas sere la misma botella esperando a ser descubierta. Somos cuerpos sin almas. La única diferencia es que yo si puedo decir que siempre hice el amor, porque a pesar de que jugastes conmigo yo te ame. A pesar de que sos un dios, yo te adoro por tu amor y no por tu condición de inmortal.

Descarado, el Dios se marcho a sus tierras celestiales, dejando a Jazmin en un estado de tristeza eterna. Nadie en su comunidad quiso a Jazmin por lo tanto murio vieja y sola, a pesar de haber sido una de las muchachas más lindas en su pueblo.

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