Si o no. Una simple respuesta puede cambiar el curso de tu vida en menos de un minuto. ¿Cuánto tiempo toma decir si o no? ¿Podes imaginar tu vida si la respuesta que distes hubiera sido distinta? Mundos paralelos, escenarios asimétricos, nuestras vidas están llena de esas alegorías que no nos detenemos a experimentar. ¿Seria diferente si mis respuestas hubieran sido otras? O ¿seria la misma?
Me atrevo a imaginar mundos que pudieron haber existido, me aislo con mi mente de un futuro que quizás nunca sera. Simplemente soy lo que no fui, soy lo que voy a ser quizás o soy lo que soy. Soy causa y consecuencia, solamente. Respiro profundo, pero ¿es exactamente aire lo que respiro? Sin respuesta, la física me daría una ecuación. No busco entender lo complejo, me remito a una respuesta más corta, más simple como un si o un no. Quizás no exista tal simpleza.
Ni siquiera sé si estaría a donde estoy ahora.
A veces pienso que el sistema es lo único que tiene alguna verdad. Es simple, para el sistema solo soy un número y un nombre, toda mi vida es registrada con unos signos. ¿Y después? Mis actos se resumen a respuestas que di, doy y daré, mi vida conlleva un lineaje montado por preguntas y respuestas. Soy un sistema. Pero de vez en cuando ciertas anomalías me llevan a cuestionarme, ¿es real lo que vivo? ¿soy realmente así como veo hoy? ¿Quién soy? ¿Mañana seré igual?
No.
Escapo de mi otra vida a medida que respondo.
Me atrevo a imaginar mundos que pudieron haber existido, me aislo con mi mente de un futuro que quizás nunca sera. Simplemente soy lo que no fui, soy lo que voy a ser quizás o soy lo que soy. Soy causa y consecuencia, solamente. Respiro profundo, pero ¿es exactamente aire lo que respiro? Sin respuesta, la física me daría una ecuación. No busco entender lo complejo, me remito a una respuesta más corta, más simple como un si o un no. Quizás no exista tal simpleza.
Ni siquiera sé si estaría a donde estoy ahora.
A veces pienso que el sistema es lo único que tiene alguna verdad. Es simple, para el sistema solo soy un número y un nombre, toda mi vida es registrada con unos signos. ¿Y después? Mis actos se resumen a respuestas que di, doy y daré, mi vida conlleva un lineaje montado por preguntas y respuestas. Soy un sistema. Pero de vez en cuando ciertas anomalías me llevan a cuestionarme, ¿es real lo que vivo? ¿soy realmente así como veo hoy? ¿Quién soy? ¿Mañana seré igual?
No.
Escapo de mi otra vida a medida que respondo.
1 comentario:
Waw, waw, waw.
Me gusta cuando lees algo y al terminar no entendes donde carajo estas parado en el universo.
Es verdad, el si y el no son grandes desiciones, pero si existiera el destino no habria tanto problema, estarias destinada a ser esta persona q sos ahora.
Pensandolo en pasado: no habria posibilidad de q hubieras dicho "no" cuando dijiste "si", ya estaba escrito.
Pensandolo en futuro: El "si" q vas a dar dentro de 10 años ya forma parte de vos.
Si afirmaras la existencia del destino no tendria ya sentido cuestionarte quien hubieras sido ya q eso no tendria lugar en la realidad.
Pero el destino es el comodin en el maso de los supersticiosos, al igual que Dios lo es en el maso de los religiosos y el infino lo es en el de la ciencia.
Lo absoluto y lo sobrenatural es un reflejo normal de la mente humana ante una pregunta sin respuesta, quizas una patologia psicologica. Creo q la realidad es mas compleja y nadie jamas va a desifrarla.
Aun asi aveces creo en el destino, no lo puedo evitar, soy humano, jeje.
Me gusto mucho tu texto.
-Jorge-
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